Llegábamos con necesidad de ganar al partido, nadie lo escondía. Hay tiempo por delante pero Baskonia es un rival directo por evitar los puestos de descenso. Los de Vitoria llegaban con una plantilla renovada y reforzada.
Con todo esto, el partido empezó demasiado frío y con demasiados errores tanto en ataque como en defensa. A mitad de primer período el marcador lucía un nada común 2-2. Cuando las muñecas parecían demasiado frías apareció el capitán Mario Álvarez para anotar un triple que hizo resurgir de nuevo a la afición y a ambos equipos.
El segundo cuarto fue otro intercambio de canastas. Por nuestro lado Seydou Aboubacar era dueño y señor de la zona mientras que Mario, Fernando y Adrián sumaban en la anotación exterior. Por lado visitante, Kristaps Gluditis conseguía desequilibrar a nuestra defensa anotando con facilidad. Al descanso las cosas se quedaban con 37-36 en el marcador.
Tras el paso por vestuarios nuestro equipo consiguió sumar desde la línea de tres pero apareció la figura de Miguel González por parte de Baskonia, que anotó con mucha facilidad. Baskonia dio un paso más en defensa y consiguió las primeras rentas con una máxima de 7 puntos a favor obligando a Carlos Díaz a pedir un tiempo muerto para aclarar ideas.
En los minutos finales el marcador era un constante empate y +2 para ambos equipos. Así, Adrián Fuentes forzó para jugársela en los tiros libres donde no falló. Baskonia tuvo oportunidad para al menos empatar el partido pero en primer lugar Raieste y posteriormente Williams llevaron el balón de juego al techo de la Bombonera que respiró aliviada y celebró la victoria tras el fallo de Kurucs desde la línea de 3 en el último segundo. Final y alegría, 77-75.
Séptima victoria para nuestro equipo que aunque no consigue salir de los puestos de descenso si empata con los que le preceden situándose a una sola victoria de los puestos de Play Off. Un partido, la diferencia entre la mitad de tabla o los puestos señalados en rojo. ¡VAMOS EQUIPO! Próximo destino Martorell.
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